El Madri$ gana y las estadísticas dicen que no sera campeón (82-61)

Todo empezaba a las 3 más o menos en el Magariños, donde habíamos quedado más de un centenar de dementes, para ir en metro hasta la Caja Mágica. Después de ir andando hasta la estación de Nuevos Ministerios, partimos por la linea 6 hasta Arguelles, para desde allí coger la linea 3 hasta San Fermín Orcasur. 

Después de teñir de azul el metro, y ver como algunos viajeros grababan para la posteridad esto tan poco habitual de ver, llegamos hasta San Fermín, donde a la salida nos esperaban agentes de la UIP, que nos hicieron pasar entre dos lecheras para cachear a uno por uno, como si de ultras peligrosos se tratara, lo cual es un poco surrealista, ya que ni en el fútbol pasan estas cosas, pero bueno no hubo ningún inconveniente.


Después de más de media hora de espera en el descampado colindante el Metro, los agentes ya nos dejaron partir hacia el pabellón. Eso si nada más empezar a andar, hubo algún problemilla, porque las cabezas pensantes querían que fuésemos más de 200 dementes por un acera de unos 2 metros, en vez de poder ir por la carretera. Luego recapacitaron y fuimos por la carretera, siguiendo a la pancarta que abría el corteo. Teníamos policías por ambos flancos, y yo la verdad que no había caminado tan seguro por ese barrio marginal. 

Al llegar al pabellón, otra mala planificación de las UIP, obligándonos a colocarnos para el reparto de entradas, en el lugar donde a mi juicio más entorpecíamos el acceso a la Caja Mágica, es decir en el puentecito que da acceso a ella. Después del reparto, y tener que aguantar la charla de Gominolo, el de seguridad del Estu, de que nos iba a caer una multa de 3000€ por los cánticos, conseguimos entrar al pabellón.

Una vez dentro, los del Madrid, como buenos señores, no se conformaron con no querer vendernos las 410 entradas solicitadas, para que no arruinásemos la animación de los 4 gatos que allí se juntan, sino que te mandan a una de esas esquinas, desde donde tan bien se ve el baloncesto, cortesía del arquitecto Perrault, que construyo una caja muy bonita estéticamente pero con una funcionalidad y una acústica pésima.

El partido fue un paseo local, con el Estudiantes saliendo con poco intensidad defensiva gracias al Big Three entre otras cosas, y estando casi nulos en ataque, y esto el Madrid lo aprovechó con Reyes y Tomic, quienes tenían dos y hasta tres oportunidades de anotar o de forzar la personal de Asselin o Caner-Medley. Con esto se llegó al 17-6 y aunque Luis Casimiro sacó a Gabriel y a Jasen, y luego a Clark, para ver si el equipo reaccionaba, la cosa no fue así y el Estu llegó 23-10 abajo al final del primer cuarto.

Reyes, Tomic, Mirotic o Garbajosa, siguieron dominado ambas zonas y el partido en el segundo cuarto. El único interior que les hizo frente, fue Daniel Clark y solo jugó 17 minutos, algo que da que pensar sobre el reparto de minutos de Casimiro.Llull y Velickovic, contribuyeron también en el 48-30 al descanso, al que se llegó con 70 de valoración del Madrid por 19 de los colegiales, 20 rebotes locales por 11 del estu, y cero de siete en triples de los del Ramiro.

En el descanso, baje al baño, donde de buen rollo, algunos dementes se mojaron los unos a los otros, y se hizo algún cántico, que supuso un pequeño roce con uno de seguridad de los contratados por el Madrid.

A la vuelta del descanso, el Asefa Estudiantes mejoró su defensa, y Caner-Medley tiró de su equipo con seis puntos consecutivos para acercar a 15 a los colegiales a tres minutos para el final del tercer cuarto, pero Carlos Suárez, quien nos debe de tener muchas ganas, lo que no será por la gran oportunidad que le brindamos en su momento de dedicarse a esto del basket, ampliaba la renta de los locales.

Así se llegó al final del tercer cuarto 13 abajo con Pancho Jasen, ya en los vestuarios con un esguince de grado medio en el tobillo izquierdo, en el partido en el que cumplía los 400 partidos en ACB. El último cuarto, ya empezó con casi todo decidido, y Fischer y Velickovic sentenciaron el encuentro.


Cuando acabó el partido, nos hicieron quedarnos allí para evitar conflictos, no dejando salir siquiera al bloggero de Planetacb, quién debía de bajar a hacer las entrevistas de los jugadores. Eso sí, no les debió de importar que vinieran los BSK desde la otra punta del pabellón hasta debajo de nuestra puerta para salir por ella, porque claro eso no debe de crear conflictos.....pero vamos nada nuevo en un derby.

Ya a la salida, hay que destacar que los malos modales de uno de esos elementos llamados vigilantes de seguridad, a quién le debió de molestar la presencia de tanto demente en la grada y debía de tener ganas de irse a casa pronto, provocaron un momento de gran tensión al empujar a un demente que se había quedado en las escaleras parado, nada menos que cantando, y esto hizo subir a los agentes de la UIP, para crear más tensión, lo que acabó con más empujones a chicas y señoras, que bajaban tranquilamente la escalera. Luego a la salida, del pabellón un grupo de indeseables madridistas empezaron a tirar botellas, mientras la policía ya había puesto las de Villadiego, llegando cuando el incidente ya había terminado.


Real Madrid 82 (23+25+15+19): Prigioni (5), Llull (17), Carlos Suárez (8), Reyes (9) y Tomic (13), Tucker (7), Fischer (6), Mirotic (4), Velickovic (10), Sergio Rodríguez (0), Garbajosa (3) y Vidal (0).

Asefa Estudiantes 61 (10+20+20+11):
Granger (5), Ellis (0), Sergio Sánchez (2), Caner-Medley (14) y Asselin (4), Gabriel (5), Jasen (11), Oliver (6), Clark (6) y Welsch (8).

Así que el Estu deberá mejorar en los próximos partidos, para evitar sufrir de más esta temporada, y para ello es clave ganar al Valladolid en casa el sábado. Por otra parte, también hay que decir que si sigue la tradición de los últimos años, el Madrid no será campeón de liga, y sino que se lo digan al Barça el año pasado, porque quien gana los dos partidos al Estu, no gana la liga, y en este curso seguramente o Baskonia o Barça harán que se vuelva a cumplir esta máxima, al haber salido derrotados de Vistalegre.

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