Tras dejar inacabado mi viaje a Portugal, volvemos con el penúltimo día que nos iba a llevar a ver el barrio de Belém, donde íbamos a ver el precioso Monasterio de los Jerónimos, uno de los lugares más visitados de Lisboa.
Para ello hubo que levantarse temprano para estar allí cuando abrieran y evitar así colas innecesarias, ya que nuestro planning para el día era muy completo. Así que salimos de nuestro hotel Dom Alfonso Henriques en torno a las 9 y media, para aparcar el coche cerca del Estadio do Restelo, sede del Os Beleneses.
El Atlético de Simeone volvió a perder como ya hizo contra el Barça en el Calderón, y aunque este sea sólo el segundo partido que pierde Simeone con el Atleti, hay que destacar que al equipo hoy en Mallorca le ha faltado esa intensidad que había instalado el Cholo en el equipo, además de estar muy desafortunados en defensa como muestra el autogol de Godín.
Pero lo más preocupante, es que este equipo me ha vuelto a traer a la mente detalles que desde la marcha de Manzano creía olvidados, como es la total indiferencia y falta de cojones de los jugadores. Así que tras una primera parte muy mala de ambos conjuntos, llegaba la mala noticia para los atléticos.
El Asefa Estudiantes venía de ganar en Málaga en el debut de Trifón, y quería seguir con la racha esta vez en el Palacio en el que iba a ser el debut del propio técnico, de Tariq Kirksay o de Willie Deane como locales. El cambio era necesario, y como ya se vio en el Carpena el equipo ha mejorado en ilusión y en intensidad defensiva, cosas básicas para sacar victorias con esta plantilla tan justita.
Tras un gran trabajo del departamento de Marketing y Comunicación con el acto de ayer viernes en el que se anunció que Asefa renovaba como patrocinador un año más, y con el anuncio de ¿Y tú sabes quien eres? junto con la campaña tuitera de #ElUltimoEmpujon, hoy se podía asistir al partido por 10€ para no abonados y 6€ para abonados con regalo de camiseta con dicho hastag, lo que me parece una genial manera de intentar llenar el Palacio en momentos duros como este.
Quizás animados por la buena afluencia de público, con mucho niño a quién convendría ir fidelizando, y también en parte por el buen ambiente que ha transmitido Trifón Poch al equipo, el Estudiantes salía como una auténtico cohete marcando un 9-2 de inicio, que se tradujo posteriormente en un 13-2 tras un tiempo de Fotis.