Volvía el Estu al Palacio tras los últimos 5 sinsabores, 2 de ellos precisamente en el Palacio de los Deportes frente a Valladolid y Bilbao Basket, y a pesar de que el partido amenazaba con ser uno de esos que rememoran cada año el día la marmota no fue así.
Quizás contagiados por el homenaje a Alberto Toledano en los prolegómenos del partidos, los jugadores volvieron a demostrar ambición, intensidad y ganas de jugar, detalles que en los últimos 5 partidos sólo se habían visto con cuentagotas.
